Para las naciones indígenas, el derecho al buen vivir es poder vivir en el territorio. A partir de allí se recupera la conexión con los elementos de ese espacio físico/espiritual que tiene su correlato con la soberanía alimentaria.
Buenos Aires.- La muerte no constituye una tragedia para las cultura mapuche, es la continuidad del ser dentro de la totalidad existencial y universal. En la provincia de Buenos Aires, al igual que en el resto de las provincias argentinas, estos derechos aún no están garantizados.
«Es necesario construir una nueva normatividad a nivel provincial: una ley de cementerios indígenas que dé un marco regulatorio, para que las comunidades mapuche o indígenas tengan acceso a estos espacios sagrados, sin el intervencionismo de ningún gobierno local, provincial o nacional», expresaron los representantes de distintas comunidades. Esto, en el contexto de la resolución del conflicto actual en torno a pu eltuwe.
El territorio mapuche de la provincia de Buenos Aires, presenta varios desafíos en términos de gobernabilidad y legalidad, uno de ellos es el abordaje de los conflictos actuales por el pu eltuwe no reconocidos por el Estado Provincial y la administración irregular durante los sucesivos gobiernos municipales.
“Restituir los pu eltuwe, _cementerios históricos_ mapuche a las comunidades mapuche, debe ser una obligación del gobierno provincial con el correspondiente marco normativo-legal. Hoy no contamos con el descanso en el territorio que una/o ha nacido para hacerse mapuluwün -territorio-vida-. Este, es un derecho cultural y fundamental de todo mapuche», manifestó, Lorena Selena Arroyo, una de las integrantes de la comunidad Trawün ko de Punta Indio.
En conjunto los presentes exigieron no ser despojados nuevamente de un espacio para descansar como un derecho humano.
Para las naciones indígenas, el derecho al buen vivir es poder vivir en el territorio. A partir de allí, se recupera la conexión con los elementos de ese espacio físico/espiritual que tiene su correlato con la soberanía alimentaria.
Cuando existe una búsqueda personal de la identidad cultural, se arma el rompecabezas de la historia personal y colectiva del pueblo.
«Debe existir el vínculo con los ciclos naturales para obtener la medicina y también despedir a nuestra familia, para que puedan tener su buen morir. Tenemos muchos derechos vulnerados hace siglos, el poder compartirlos fue el motivo de estos encuentros”, señaló Cecilia González de la comunidad Epu Lafken, en Los Toldos.
Insistió en la importancia sobre los puntos de acuerdo, para una muerte digna. Mirta Millán de la comunidad Pillán Manque de Olavarría, también coincidió en ir sembrando huellas desde lo comunitario y en lo colectivo.
La provincia de Buenos Aires es un territorio amplio y diverso, en donde el pueblo mapuche cohabita en zonas rurales y en la urbe.
La muerte digna tuvo una discusión en un encuentro donde convivieron y compartieron las personas de Pillán Manque de Olavarría, Epu Lafken de Los Toldos, Ñuke Mapu de Los Toldos, Kalvú Shotel (mapuche/Tehuelche) de Villa Elisa, Vecinos mapuche, la Azotea y la comunidad Kalfulafken de Carhué, además participaron vecinos de la zona que producen alimentos agroecológicos y miembros de organismos de derechos humanos de la zona.
El segundo encuentro se realizó en el espacio de la Radio Comunitaria de Punta Indio, la anfitriona fue la comunidad Trawün ko, cuyo nombre significa encuentro de aguas.
Texto/Fotos: Minka Comunicación