Tras la desaparición de Yesenia Pascual Ramos para su familia, los días no solo han ocurrido en tristeza y frustración, sino también han sido semanas de desgaste económico.
Para solventar los gastos en la búsqueda de su hija, don Esteban puso a la venta sus borregos, un par de bueyes, también vendió un terreno y hasta ha conseguido préstamos. Sin embargo, los gastos cada vez son mayores.
“Hay que trasladarse hasta la ciudad de Oaxaca, para realizar algún trámite, los gastos van desde el pasaje, la comida, copias, hospedaje, entre otras necesidades. Algunas citas implicaban quedarnos por varios días, para concluir con los trámites”, explican.
A seis años de la desaparición de Yesenia, la familia platica su largo andar y su cansancio, pero sobre todo el desgaste emocional y económico que día a día enfrentan, para encontrar con vida a su hija.
“Hay días que queremos tirar la toalla, pero luego pensamos: y si está viva; si la tienen encerrada y ella está esperando que la rescatemos, entonces volvemos a animarnos y continuamos”, dice don Esteban con voz cansada y con un suspiro.
La familia es de escasos recursos, viven en una comunidad sumergida en la sierra de Mixteca, en San Isidro Yucumay, perteneciente a San Juan Mixtepec. En Yucumay habitan alrededor de 15 familias que apenas y cuentan con los servicios básicos.
Los padres de Yesenia se dedican al campo, al igual que los demás vecinos de la comunidad; la mayor actividad que realizan es la cosecha del maíz y frijol, para el autoconsumo.
Según la estadística de localidades del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, San Isidro Yucumay está catalogada como zona rural de muy alta marginación.
Yesenia Pascual Ramos, un caso de desaparición forzada
A inicios del año 2020, el Comité Contra la Desaparición Forzada de la ONU admitió el caso de Yesenia Pascual Ramos como desaparición forzada debido a la a las irregularidades en el proceso de denuncia ante las autoridades del Ministerio Público de la Fiscalía General de la Republica (FGR).
Durante el proceso de denuncia y señalamientos por la desaparición en contra de nombre Sergio López Juárez originario de San Juan Mixtepec, Erika Pascual fue intimidada por los Agentes de la Policía Estatal de Investigaciones del Ministerio Público de Tlaxiaco.
La respuesta de las autoridades de justicia fue la siguiente: “Nos dijeron que no la buscáramos porque estaba involucrada en la delincuencia organizada; que, ella estaba a gusto y nosotros preocupados. Y como evidencia, tenían unos videos que le había proporcionado una empresa comercial del centro de la ciudad.
“Supuestamente en esos videos, se veía a mi hermana Yesenia Pascual Ramos subirse a un automóvil de lujo, por eso no debíamos de investigar ni denunciar”, recuerda, Erika. Además, las autoridades aseguraron que esas “supuestas personas”, tenían armas de mayor calibre que el propio Agente de Investigación.
Durante el proceso de denuncia, Erika insiste que, fue intimidada para no continuar con la búsqueda, menos hacerlo público en los medios de comunicación ni en las redes sociales, pues podía “alertar a la delincuencia organizada” con ello, las autoridades no “podían protegerlos”.
En esas fechas, debido a la intimidación de los agendes, la familia Pascual Ramos, tuvo que cambiar de domicilio. Luego de varias semanas, Erika Ramos, continuó con la denuncia de desaparición y exigió que se mostraran los supuestos videos y pruebas que decían tener y que no habían aportado al legajo de investigación.
Sin embargo, el Agente Ministerial de Investigaciones dijo que no los tenía, pues la empresa no los había facilitado. “Que, en realidad, no había resultados, ni avances en torno al paradero de mi hermana Yesenia”, recuerda.
Reportera: Juana García